Por segunda vez en mi vida, me tocó ir a una celebración de 50 años de matrimonio. La primera, fue la de mis abuelos 8 años atrás, increíble, emotivo, romántico....pero claro, era mi familia la que estaba reunida en una fiesta inmensa preparada para las dos personas mas importantes de mi mundo. En la de anoche, no conocía a nadie, ni siquiera conocía las historias de los mas cercanos, pero la sensación terminó siendo las misma. Esa sensación de que ellos hicieron las cosas bien, de que en estos 50 años lograron construir una familia con lazos sólidos y valores profundos y con la imagen de que habían vivido trabajando día a día para lograr lo que estaban celebrando. Que a pesar de que no todo había resultado fácil, lo habían hecho juntos y con mucho amor. Que al igual que mis abuelos, se miraban y eran mas que amigos, eran cómplices. Que seguían enamorados y enamorándose........
No sé cuál es el fin de comentar esto, tal vez solo para recordarme que el amor para toda la vida si existe y que el trabajo en conjuntos, la paciencia, el respeto y reconocimiento mutuo tienen una recompenza al final del camino.
1 comentario:
que linda es esa celebracion, me encantaría a mi poder hacerlo algun día sería algo muy lindo
Publicar un comentario